El
chupete es una de las grandes preocupaciones de muchos padres que traen a sus
hijos a nuestra guardería infantil en el
Barrio del Pilar, Madrid, ¿cuándo hay que quitárselo? pero, sobre todo,
¿cómo hay que hacerlo para que no se convierta en un drama?
La misión del chupete es la de calmar el reflejo de succión que tienen todos
los niños incluso desde antes de su nacimiento. Se ha podido comprobar mediante
ecografías que el feto empieza a chuparse los dedos entre las semanas 13 y 14
del embarazo. La succión no es solamente y un reflejo nutritivo, sino que tiene
efectos relajantes, y estos efectos se prolongan hasta alrededor de los 2 años.
Es evidente que no se puede quitar el chupete de una manera drástica. Como bien
sabemos cuantos trabajamos en una guardería
infantil en el Barrio del Pilar, Madrid, los niños necesitan tiempo para
irse adaptando a los nuevos hábitos. Para iniciar el proceso es necesario
elegir un momento de estabilidad, en el que no haya cambios previsibles. Lo
ideal, por lo tanto, es comenzar unos meses antes de empezar el cole,
aprovechando, por ejemplo, los meses de verano
o la Navidad.
Los niños son perfectamente capaces de comprender las situaciones pero sólo si
se le explican de la forma adecuada. Hay que hablarle para hacerle ver que ya
se está haciendo mayor y que muy pronto dejará de necesitarlo. Lo que es
completamente desaconsejado son los métodos coercitivos (castigos por usarlo) o
impregnarlo en vinagre u otras sustancias amargas. Las situaciones
desagradables incrementarán su ansiedad y buscara en el chupete el efecto
calmante que necesita.
Si tienes problemas para retirarle el chupete a tu hijo puedes pedir consejo a
los profesionales de Os Pequerrechos.